La disputa por la dirigencia nacional de Morena se avivó entre descalificativos e insultos.
Luego de que Porfirio Muñoz Ledo advirtió que este lunes tomara protesta, su contrincante Mario Delgado lo acusó de ambicioso, vulgar y sostuvo que puede convertir a Morena en un partido de oposición al gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Por su parte, Muñoz Ledo descalificó los señalamientos sobre el control que ejercería sobre Morena y afirmó que con ese puesto terminaría su vida política.